Atención al público en una heladería de rosario

Por: Anónimo • Industria: Otrohace 13 días

"Entré a trabajar en una heladería con pocas expectativas de crecimiento. Venía de otra donde me habían explotado, así que buscaba un poco más de humanidad. Como pasa en gran parte de la gastronomía, estamos en negro, trabajamos 8 horas la cuál 4 son en negro, los feriados no se pagan doble ni las horas extra aveces no te la pagan.

Pasó un año y seguíamos igual: sin aire acondicionado, sin bebedero, los clientes se quejaban del calor con razón y nosotros poníamos la mejor cara posible. Un día una tormenta rompió todos los vidrios del segundo piso mientras estábamos trabajando. Por suerte nadie salió herido, pero tuvimos que proteger todo del agua y al día siguiente sacar los vidrios y ventanas enormes nosotros mismos.

Cuando finalmente los cambiaron, una araña del techo se prendió fuego. Tuvimos que apagarla, limpiar el extintor y seguir atendiendo al público como si nada. Una encargada, durante una charla que hizo Recursos Humanos (porque habían salido malos comentarios en Google), se animó a contar todo lo que pasaba y que no había suficiente personal. Al mes la echaron.

Hoy tuvimos otra ‘capacitación’ de Recursos Humanos. Hablaban del buen clima laboral y la atención al cliente. Comenté que después de más de dos años no arreglaron nada. La respuesta fue que “todo depende de cómo uno afronta la situación”, que “yo elegí trabajar en atención al cliente”, y que tenía que poner en una balanza lo malo (estar en negro, no llegar a fin de mes, tener demasiadas tareas) con lo bueno, como que los clientes te inviten a eventos… o te chamuyen.

No podía creer lo que escuchaba. Ya no sé qué más hacer para salir de este infierno."

Comentarios

Cargando comentarios...