El multirubros del terror

Por: Anónimo • Industria: Comerciohace alrededor de 2 meses

Hola, ¿cómo estás? Primero que nada, quiero agradecerte por tu espacio en redes, realmente ayuda a despejar dudas de todo tipo y acompaña, en mi caso, en un momento sin trabajo y con "heridas" del empleo que dejé.

Te cuento mi historia. Trabajé 18 años para una tienda multirubro en Córdoba, donde ingresé a los 19 años con la noticia de que íbamos a ser padres con mi pareja. Era un mundo nuevo para mí, pero ya tenía experiencia laboral y empecé con buen pie. Siempre fue un trabajo arduo, de seis días a la semana, incluyendo fines de semana y feriados.

Con los años, compañeros y buenos jefes, de quienes aprendí mucho, dejaron la empresa y empezaron a llenar esos lugares con cualquier candidato. Me quedé mucho tiempo para que mi pareja terminara sus estudios y para cubrir nuestras necesidades. Después de varios años, empezaron con "políticas" para cansarnos y que renunciáramos. En la pandemia, nos ofrecieron poco dinero para irnos con la excusa de pedir "la quiebra", y mucha gente aceptó. Los más antiguos decidimos esperar.

Los últimos años post-pandemia fueron de hostigamiento, sobreexigencia y maltratos. Trajeron a una gerenta con denuncias de maltrato y acoso, que encontró estabilidad en la casa central debido a los números. Con ella, todo fue acoso, persecución y provocación. Se mostraba un claro privilegio para el sector textil, mientras el resto pasábamos por mil cosas.

Particularmente, no podía acercarme a hablar con nadie, tenía que trabajar solo, en silencio, excepto para atender clientes. Cubría dos sectores que antes atendían diez personas, y me lesioné la columna. Me operaron, pero decidí quedarme porque no querían indemnizarme; querían que renunciara.

Finalmente, este abril intentaron apercibirme por causas inventadas, y luego me llegó el telegrama de despido. Ya estoy con un abogado en el reclamo, pero la tristeza de salir así, sin dinero después de tantos años, me pesa. Estoy buscando trabajo con la mejor expectativa, pero el bajón interno no se va. Gracias por el espacio y la compañía con tus historias en TikTok. Saludos.

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